Se trata de la Isla de Queimada Grande, conocida como la isla de las cobras.
En Brasil hay una isla remota que tiene el acceso prohibido a los seres humanos. ¿El motivo? Es el lugar más peligroso
del mundo.
Se trata de la Isla de Queimada Grande, que cuenta con una población de más de 2.000 ejemplares de bothrops insularis, una serpiente que tiene un veneno cinco veces más potente que el de la yarará.
Debido a la letalidad del veneno de las cobras, los seres humanos no pueden visitar ni residir en la isla.
Actualmente se admiten únicamente misiones científicas para investigar a la especie. En ese caso, solo pueden acceder profesionales acompañados de al menos un médico.
Con información de Un Mundo Inmenso
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